Este año, el precio de los vehículos subió más que en los últimos tres años, con ajustes que han sido de entre un 6 y un 14%, según el modelo y la marca. Lo valores se ajustaron mes a mes y el impacto -aseguran en las concesionarias- fue más “digerible” para el cliente y ello quedó a la vista con el récord de ventas que se espera para el 2010.
