Elio Pavón llegó a la meta media hora más tarde que el ganador y sin embargo se llevó todos los aplausos. Es que el hombre tiene 80 años y decidió correr en la categoría competitiva del 3er Maratón de la Familia, que se realizó ayer por la mañana. Con su fuerza de voluntad y su empeño representó a la gran cantidad de abuelos que llegaron desde distintos departamentos para participar del encuentro y que hicieron el recorrido desde la Catedral hasta el Parque de Mayo caminando. Y les demostró a las 300 personas que se reunieron en el evento que siempre se puede.
En las manos de la mayoría de las personas que integraron la categoría participativa del maratón organizado por el Ministerio de Desarrollo Humano, se veía los carteles de distintos consejos del adulto mayor de la provincia. Los abuelos llegaron temprano, sonrientes y cubiertos por bufandas, ponchos y camperas. Así y al ritmo de la música, entraron en calor antes de la caminata hasta el Parque. Junto a ellos se prepararon muchos chicos discapacitados que llegaron en grupo desde distintos departamentos. Mientras que, los corredores experimentados, que participaron en la categoría competitiva, precalentaron trotando.
La largada del maratón, que fue organizado en el marco de los festejos por el Bicentenario de la Patria y que se iba a realizar hace dos semanas pero se suspendió por la lluvia, fue a las 10.40. La Central se llenó de personas que caminaban y, media hora más tarde, llegaron al Parque y se reunieron frente al Monumento al Deporte, donde se hizo la entrega de premios. Pero el que faltaba era Elio. Su esposa Elsa, de 70 años, lo esperaba después de haber participado en la categoría participativa. Cuando Elio la vio, aceleró el trote para abrazarla. En ese momento, el cronómetro no importó, lo que destacó el hombre fue que "llegué, lo hice yo solo". Inmediatamente, toda la gente, grandes y chicos, se acercaron a saludarlo.
