Capitán del seleccionado y uno de los mejores ala-pivot del mundo, Scola es la esperanza argentina en Turquía ante la ausencia de Ginóbili. A los 30 años, lidera al equipo en la cancha y también habla afuera. Tuvo un gran nivel en su última temporada en los Rockets, que le renovaron el contrato hasta el 2015 y lo premiaron con 47 millones de dólares por ese vínculo.