La intención de practicar deporte no es lo único que llevó ayer a correr por primera vez a muchos de los maratonistas que participaron en el Maratón de la Fundación de San Juan. Sino que a eso se sumó, en algunos casos, la responsabilidad de aprobar un examen, las ganas de juntar dinero para el viaje de egresados, acompañar a la familia y hasta la intención de mostrar alguna cualidad artística. Así, muchas personas se animaron a cruzar el arco de largada y a correr varios kilómetros.
La carrera comenzó a las 15, media hora más tarde de lo previsto. Y los 10.000 maratonistas (según los organizadores) aprovecharon esos minutos para calentar el cuerpo. Fue el gobernador Gioja quien bajó la bandera para dar inicio a la carrera. Y entre el malón no sólo había corredores experimentados, sino también primerizos.
"Mis compañeros corrieron el año pasado, pero para mí esta es la primera vez. Vengo por obligación. El profe de Educación Física nos dijo que si corremos los 5 kilómetros del maratón aprobamos la prueba de resistencia", comentó Franco Golfiere, alumno de 3ero 1ra de la Escuela Industrial. Y contó que "igual estoy contento porque me estoy divirtiendo con mis amigos".
Otra de las que se animaron a correr un maratón por primera vez fue Cristina Lucero. Ella emprendió el desafío para acompañar a los alumnos de la escuela Agustín Gnecco, de la cual es directora, y a sus propios hijos.
"Los alumnos de la escuela ya corrieron otros años, pero yo no me animaba. Ahora, además de ellos vienen mis hijos, entonces me decidí", contó la mujer.
Con intereses económicos corrió Eva Martín, de 16 años. Con el táper lleno de rosquitos y bizcochuelo llegó a la ex Estación San Martín, donde estaba la largada. "Queremos irnos de viaje de egresados a Bariloche. Esta es una buena oportunidad para hacer deporte y vender cosas dulces para juntar algo de plata", contó.
Entre ellos también hubo cursos completos de algunas escuelas que fueron por primera vez al maratón. Uno fue el de los alumnos del Excellence College y otro, el de la escuela Provincia de Tucumán. Además de uno de la Marcelino Guardiola, que le pusieron ritmo al evento tocando la batucada. "No tuvimos tiempo de entrenar para correr. Pero trajimos los sombreros, los zurdos y los platillos, para acompañar a los maratonistas con nuestra música", contó una de las maestras de esa escuela.
Tras el recorrido, todos llegaron al playón del Híper Libertad. Allí los esperaba el escenario armado sobre el que tocaba la banda Mega. Y el sorteo de premios para los participantes, como bicicletas y computadoras.

