Aunque por distintos motivos, compartir la cena de Navidad en un restaurante o parrilla sigue siendo la mejor opción para muchos (a esta altura ya hay varias reservas hechas), es cierto que también es una decisión importante para los bolsillos de cualquier familia tipo. De hecho, este año, la oferta tuvo un incremento de hasta el 66,6% respecto del año pasado, relevando los mismos lugares y con propuestas similares. Según comentaron desde el sector, el aumento se debe -entre otras cosas- al encarecimiento de las materias primas con las que elaboran sus menúes.
Por ejemplo, entre los que más aumentaron está la parrilla La Gringa, donde el precio por persona pasó de $150 a $250 (subió el 66,6%) y Los Toneles, que fue de $230 a $380 (65,2%). Remolacha creció de $198 a $245 (23,7%) y el Hotel Del Bono Park ascendió de $300 a $360 (20%). En El Puente, el incremento fue de $230 a $260 (13%); y en Tres Soles, bastante más leve, únicamente de $240 a $250 (4,1%).
Otros espacios, como El Rancho de Pelufo, mantienen el precio con el mismo menú, sólo que esta vez ofrecerán medio litro de bebida por persona y no uno