San Juan, 3 de diciembre.- Gesticulan lento sus palabras y miran de frente a los niños sordos para que les lean los labios, les hacen tocar sus caras y vestimenta y les explican las escenas los chicos que sufren ceguera. Esas son algunas de las prácticas que un grupo de payasos aprendió a hacer para poder llegar con su alegría a los niños con diferentes discapacidades.


La tarea no fue fácil. Estos “payasos” hacen sus animaciones en forma voluntaria en sus tiempos libres y, para especializarse, tuvieron que dedicar parte de sus días luego de sus actividades habituales en el trabajo o en la escuela. Desde hace varios años vienen con el desafío de transmitir alegría, pero desde que se propusieron animar a todos los niños, se encontraron con los chicos discapacitados, a los que no podían llegar con sus animaciones convencionales.



Es por eso que el año pasado comenzaron a perfeccionarse, en áreas que les permitirán poder comunicarse frente a limitaciones físicas o mentales de los chicos y mejorar aún más su oficio. Así empezaron a aprender el lenguaje de señas, curso de dos años al que asisten tres veces por semana en el Hogar Niño Jesús.



”Después del primer año aprendimos algunas canciones infantiles con señas y a comunicar algunas cosas básicas. Hemos mejorado mucho, nuestro sueño es poder hacer teatro para sordos”, dijo Sandra Pérez a DIARIO DE CUYO ONLINE, la encargada de organizar eventos y llevar gratuitamente su grupo de payasos al lugar que los requieran.



El grupo de animadores voluntarios es numeroso y, dependiendo del tipo y lugar del evento, pueden ir 10 hasta 20 payasos. Y, a pesar de que llevan muchos años haciendo esta actividad, la función para discapacitados no les fue sencilla. “La primera vez que estuvimos con los chicos nos preparamos mucho para llegar a ellos, para afrontar los diferentes casos, pero lo mismo pasamos muchos nervios. Queríamos que la pasaran bien, que no se asustaran y que se integraran. Les contamos la historia de Los Tres Chanchitos adaptándola con eco, sonidos, bailes y señas para que todos puedan entendernos”, contó Sandra.



Así hicieron animaciones en Irina, Merceditas, S.AR.M y la escuela Braile. La próxima visita será el 13 de diciembre a la escuela Luis Piedrabuena, ubicada en Las Lagunas, Media Agua, donde también llevarán donaciones por tratarse de un establecimiento al que asisten chicos muy humildes. Luego irán al centro de rehabilitación René Favaloro el próximo 16 de diciembre y ofrecerán una obra de teatro y juegos. “Muchos de los que hacen de payasos han tomado el valor a la vida gracias a las experiencias que hemos tenido. Es una especie de terapia emocional, porque se dan cuenta que se pueden ayudar a sí mismos y pueden ayudar a los demás”, dijo Sandra.



Los que quieran sumarse al grupo o colaborar con donaciones pueden llamar al 4340825.