Después de tantas horas al día juntos, entre los chicos que van a las colonias y los profesores y coordinadores se genera un vínculo especial.

Para los chicos, los adultos encargados de trabajar con ellos y cuidarlos se convierten en unos amigos más para jugar, pero también en el respaldo para apoyarse en cosas tan simples como atarse los cordones de las zapatillas o compartir una merienda.

El trabajo de los profes es fundamental para coordinar a más de 15.000 chicos distribuidos en las 70 colonias de toda la provincia. A continuación, algunas imágenes de los niños con sus coordinadores de grupos en las colonias de Capital, Calingasta y Rawson (en una visita a la de El Palomar), pertenecientes a Desarrollo Humano.