Había tanto pasto crecido y tanta basura acumulada en la plaza que los chicos ya no podían jugar a la pelota, menos andar en bicicleta. Es por eso que una mañana los mismos niños se levantaron, fueron al lugar y decidieron limpiarlo. La movida sorprendió a los vecinos del barrio, quienes no dudaron en salir y prestar herramientas para que el grupo pudiera realizar mejor el trabajo. Sucedió en el barrio Centinela III, que está en Chimbas.
"Esto era un asco. No podíamos ni correr por la basura. Entonces nos juntamos una mañana y decidimos limpiar la plaza", contó Exequiel Paredes, uno de los chicos. También formaron parte Julián Carrizo, Rodrigo Villafañe, Guillermo Secco, Josefina Blanco Díaz y Facundo Mercado. Todos viven en el barrio desde que nacieron y se juntan a jugar a la salida de la escuela y durante los fines de semana. "Los chicos más grandes, de otro barrio, que también van a jugar a la plaza, se burlaron de nosotros. Igual seguimos limpiando. Ahora ellos siguen viniendo a andar en bicicleta", dijo Rodrigo.
El trabajo no fue sencillo, según contaron los chicos. Poco habituados a la escoba y la pala, pusieron todo para poder sacar la basura y acumularla en un rincón para que el camión de la Municipalidad se la llevara. "Nos cansamos mucho. Y hacía calor. Pero la gente grande de acá se acercó y nos dio gaseosa y galletas para que tuviéramos fuerzas para seguir", dijo Exequiel. A los chicos les llevó dos días limpiar la plaza. Lo hicieron durante el fin de semana pasado. "Ahora esperamos que no la ensucien y que la Municipalidad corte el pasto y lo levante", dijo Exequiel. Los vecinos del lugar contaron que la última vez que la Municipalidad de Chimbas limpió la plaza fue en enero pasado.
Como no tenían herramientas para trabajar, los chicos pidieron a los vecinos palas, bolsas y escobas. Se turnaron para hacer el trabajo y durante todo el fin de semana no jugaron a la pelota ni anduvieron en bici. El único objetivo fue dejar la plaza impecable. "Nos llamó la atención la iniciativa, y nos alegró que naciera de ellos mismos. Todavía tenemos que aprender mucho de los niños ya que nos están enseñando que tenemos que trabajar todos juntos", dijo Silvana Vidable, la mamá de Exequiel.