En distintos edificios tienen los talleres. Allí, los sastres, zapateros, herreros y hasta los cloaquistas, hacen que cada parte del DIM 22 funcione como si fuera una gran ciudad. “Todo lo arreglamos acá adentro. Si se rompe un caño de agua o si una movilidad no funciona hay personal capacitado para que solucione ese problema”, dijo Mario Mecina, que está a cargo de varios talleres y que además es el talabartero del cuartel. Hoy, en el 75to aniversario de la creación de esa fuerza en la provincia, los efectivos que son el engranaje logístico del destacamento, contaron sus historias.
“El cuartel requiere de un acondicionamiento permanente. Por ejemplo, tenemos 100 mulas y hay que cuidarlas y necesitamos que tengan el atalaje -pecheras y monturas entre otros elementos- en condiciones. Para eso tenemos veterinarios, enfermeros, herreros y talabarteros disponibles”, dijo Fabian Iribas, el jefe del DIM 22. El coronel contó que actualmente esta unidad cuenta con 780 personas y que, de ellas, unas 200 son las que cumplen sus roles en los más de 15 oficios. El resto del personal está entrenado para dar apoyo a la comunidad y para operaciones militares propiamente dichas.
El DIM 22 festeja hoy sus 75 años con un acto en el cuartel de Marquesado, a las 18,45.

