El superclásico no escuchó las voces de la experiencia porque Juan Román Riquelme y Ariel Ortega pasaron desapercibidos y se fueron antes, Matías Almeyda y Sebastián Battaglia sólo intentaron marcar, Martín Palermo y Mariano Pavone no ganaron en las áreas y entre los técnicos, Juan José López mostró el entusiasmo del que llega y Claudio Borghi el desánimo del que se va. El “Negro” López estuvo más metido y conforme que Borghi porque su equipo rindió mejor en el primer tiempo, algo que se hizo extensivo obviamente al segundo. En el enfrentamiento entre ídolos “ganó” Ariel Ortega solamente porque estuvo en cancha 26 minutos más (fue reemplazado por Diego Buonanotte) que Juan Román Riquelme, quien deambuló por el terreno de juego visiblemente afectado físicamente por una tendinitis del gemelo derecho y salió en el entretiempo por Cristian Chávez.
