Diversión intergeneracional. Algunos niños aprovecharon las vacaciones de invierno para divertirse junto a los abuelos de la Residencia Eva Duarte de Perón.

Durante dos semanas la Residencia Eva Duarte de Perón se convirtió en un patio de juego. Es que todas las tardes, fue invadida por los niños que prefirieron divertirse junto a los abuelos durante las vacaciones de invierno. Son los que viven en los barrios cercanos a la Residencia y que también participan en los talleres culturales y artísticos que se realizan en el lugar.

El frío no fue un impedimento para que los abuelos se sentaran en medio del patio exterior a esperar a los chicos. La espera duró menos de 5 minutos porque los visitantes no quisieron retardar el inicio de las actividades y de la diversión.

El primer entretenimiento compartido entre abuelos y niños fue en realidad una competencia. La consigna era ver cuál de los dos grupos terminaba primero de pintar un dibujo. No hubo ganadores porque el desafío terminó empatado. Es que unos y otros se ayudaron a pintar cada vez que se les cansaba la mano. "Me gusta mucho pintar, pero no puedo hacer mucho esfuerzo con la mano. Menos mal que tuve una colaboradora de lujo que me ayudó a terminar", dijo Mirta de 76 que "competía" con Nicole, de 7.

Durante más de una hora niños y abuelos dibujaron y pintaron para divertirse en las primeras horas de la tarde. Quisieron comenzar la jornada de esparcimiento con esta actividad más tranquila para ir "calentando motores". Es que después participaría en juegos con mayor adrenalina como el de probar puntería o mostrar las habilidades para el baile de diferentes ritmos.

Pasión sin edad. Tanto los niños como los abuelos de la Residencia Eva Duarte se divirtieron con las competencias de metegol.

 

Avanzó la tarde y el frió se intensificó, al igual que la diversión. Para contrarrestar las bajas temperaturas algunos niños comenzaron a jugar al fútbol, actividad a la que se sumaron los abuelos en mejor estado físico. Aunque hasta los imposibilitados de correr experimentaron la adrenalina del fútbol. Participaron de la competencia de metegol con los chicos.

Para que los abuelos pudieran descansar y recuperar energías, los organizadores pusieron en marcha algunos juegos sólo para niños. De todos modos, siguieron acompañados por los residentes del Eva Duarte. No participaron activamente, pero armaron hinchadas para alentar a los chicos que participaron en las carreras con posta y algunos hasta les tomaron fotos con sus teléfonos para guardar de recuerdo. La jornada terminó con una merienda compartida.

Adrenalina. Los chicos participaron en carreras con posta y partidos de fútbol ante la hinchada que formaron los abuelos para alentarlos.

Integración

Hace cuatro años las autoridades de la Residencia Eva Duarte comenzaron con un programa de integración a la comunidad, con el desarrollo de talleres en los que pueden participar los vecinos de las zonas aledañas. Así, los abuelos comparten diferentes actividades con la comunidad como la celebración del carnaval.