No están detrás de sus computadoras, teléfonos y cámaras todo el tiempo. Tampoco son como aparentan ser en sus videos. Los youtubers son creadores de contenidos audiovisuales en YouTube son un fenómenos en expansión y San Juan no escapa a la tendencia.
En la rama del humor, del puñado de sanjuaninos que cuelga videos en la plataforma hay tres chicos que accedieron a contar sus historias. Se trata de cauceteros que se convirtieron en amigos al compartir la actividad y hablaron sobre sus vidas, la exposición pública, las críticas y de algo que los une: querer ser famosos.
Maximiliano Villegas (15) y Eduardo Arroyo (16) se conocían del barrio, pero a la vez, a través de Youtube se hicieron amigos de Franco Guaquinchay (16), también vecino de Caucete. Los tres generan contenidos humorísticos, aparecen mutuamente en sus videos, se ayudan con las ediciones de los materiales y se recomiendan en sus canales.
Fue la búsqueda de popularidad y de divertirse en ese camino lo que los llevó a ser youtubers. "No perseguimos ganar plata, sino que nos vean y nos conozcan. En lo personal, a mí me sirvió también para darme cuenta que me gusta la actuación, así que empecé a hacer talleres y pienso seguir algo de arte en la facultad. Pero querer ser popular es exponerse y saber que habrá críticas’, contó Maximiliano, quien en Youtube es Mazieze.
"Yo dejé de subir videos un tiempo para concentrarme en la escuela. Ahora que ya me acomodé en los estudios volví a generar contenidos. Y me pasó también que desde que estoy en Youtube me di cuenta que cuando termine la secundaria quiero estudiar edición de video o diseño gráfico’, apuntó Franco, cuyo canal se llama Franco Vlog.
Eduardo Arroyo es Edualex en su flamante canal, aunque desde hace un tiempo que genera videos con Maximiliano. "Una vez que tenemos la idea, empezamos a pensar qué decir y cómo mostrarlo. Recién entonces filmamos. La edición es lo que más trabajo lleva’, apuntó Eduardo.
Para grabar usan sus cámaras y para editar utilizan complejos softwares, todo un desafío para manejarlos. Subir un video, desde su producción a la edición puede llevarles una semana.
Entonces, una vez en línea, viene la necesidad de esperar las visitas. Y en ese proceso, otra vez la exposición a críticas, en la que la familia y los amigos son un soporte. "Las críticas pueden ser buenas o malas. De las buenas se aprende; otras pueden ser de mal gusto o dolorosas. Como padres apoyamos a Maxi y una forma de cuidarlo es ir acompañándolo en cada paso. Maxi no está haciendo nada malo, estudia, hace deportes y prefiero que esté activo pensando en cómo editar videos y no tirado en una plaza’, expresó María Alicia Maldonado, mamá de Mazieze.
br>
"Lo lindo que tiene Caucete es que somos pocos y Youtube nos dio cierta popularidad. La gente saluda, felicita, si no le gustó algo te lo hace saber de buena forma’, dijo Franco. "Los amigos además te piden ser parte de un video o largan ideas y eso también es una forma de apoyar lo que hacemos’, agregó Eduardo.