�Aunque no fue posible conseguir datos oficiales ni posturas oficiales sobre el caso, por lo bajo, altos jefes policiales destacaron al menos cuatro razones para explicar porqué de 36 grandes robos y solo un tercio fue esclarecido. El descuido de la gente por guardar grandes sumas en su casa; no contratar servicios policiales de custodia a la hora de hacer importantes pagos; la lentitud de los jueces en dar órdenes de allanamiento; y la falta de personal para prevenir e investigar, fueron los argumentos. ‘Muchas veces los bajos índices de esclarecimiento de estos robos se debe a que a veces los jueces no emiten rápido las órdenes de allanamientos. En casos resonantes, a veces tuvimos la posibilidad de atrapar a los ladrones en horas, pero por las demoras judiciales no recuperamos. Otro problema es que las comisarías ocupan al personal en tareas administrativas cuando deberían estar para investigar o prevenir en la calle, no para llenar libros, llevar citaciones o cuestiones parecidas’, dijo un jefe consultado. Y agregó: ‘en gran medida, también la culpa es de la gente que guarda grandes sumas en su casa o no contrata a policías cuando realiza, por ejemplo, el pago a empleados’.