Esta mañana, en la inauguración del Skatepark de Caucete, un emocionante momento tuvo lugar cuando tomó el micrófono un joven del departamento que brilla en el ambiente del skate y las BMX.

 

 

Con lágrimas en los ojos, el chico contó que en varias oportunidades tanto él como sus compañeros pasaron por desagradables situaciones en varios lugares. “Nos echaban de todos lados”, dijo, y luego agradeció por el nuevo escenario.

 

Atrás, en donde estaban apostadas todas las autoridades, el que no pudo contener la emoción fue el propio intendente caucetero Julián Gil. Conmovido por las palabras del joven, dejó rodar varias lágrimas y luego lo abrazó.