Ana y María Gil son hermanas. Una es psicóloga y la otra pediatra y desde marzo comparten la angustia de las personas que ingresan a los centros de salud con síntomas de coronavirus. Angustia que les genera el temor a tener esta enfermedad y el ser atendidas por profesionales enmascarados a los que no les pueden ver la cara. Esta última condición las motivó para poner en marcha una iniciativa solidaria que tiene por objetivo mostrar el lado humano en momentos críticos. De manera gratuita imprimen fotos con los rostros del personal de salud que se desempeña en las áreas Covid-19 para que las luzcan en su uniforme y los pacientes puedan conocer de esta manera quién los atiende. Una propuesta que psicológicamente beneficia a ambos sectores.
El caso de una joven de 15 años embarazada fue el detonante de esta iniciativa. Ingresó al hospital como un caso sospechoso de coronavirus. Cuando llegó la pediatra a atenderla comenzó a tiritar de la impresión. "Cuando ingresé a atenderla yo vestía mi uniforme con todas las medidas de seguridad que nos exigen. Tenía puesto el barbijo, la cofia, las antiparras y la máscara, así que no se me veían ni los ojos. La pobre se angustió tanto que no puede sacarme su imagen de la cabeza. Por eso sentí que debía hacer algo para intentar cambiar esta situación que afecta tanto a los pacientes como a los médicos", dijo María Gil, una de las impulsoras de esta propuesta.
En un principio, María compartió esta experiencia con Ana, su hermana, quien le dio la idea de qué hacer para no volver a pasar por una situación similar. Le propuso que imprimiera una foto de su rostro y que la colocara en el frente de su uniforme o la llevara colgada del cuello para que los pacientes conocieran su cara. La propuesta entusiasmó tanto a ambas que decidieron ampliarla y con fines solidarios.
Desde ese momento decidieron imprimir gratis las fotos de todo el personal sanitario que se desempeña en las áreas Covid-19. "Con esta acción estamos ayudando a pacientes y profesionales a sentirse un poco mejor, y más cómodos. Con esto el paciente se siente contenido e importante y no sólo un números, además verdaderamente siente que lo está atendiendo un ser humano y no una máquina. En tanto que para los profesionales de la salud el ser identificados significa humanizar su trabajo, ser reconocidos incluso por sus propios colegas y no generar temor por su aspecto", sostuvo Ana Gil.
Por otra parte, la psicóloga agregó que no sólo imprimen gratis las fotos para cumplir con esta misión solidaria, sino que también las plastifican para que el usuario pueda desinfectarlas cada vez que desee y pueda usarla sin riesgo a contaminación. Es decir, que la imagen queda como una credencial. Para esta segunda tarea contaron con la colaboración, también desinteresada, de Daniel Fernández, propietario de una imprenta, quien se ofreció a hacer el plastificado de las fotos gratis para hacer su aporte a esta noble causa. "Apenas difundimos esta propuesta por las redes sociales, comenzamos a recibir los pedidos para obtener las fotos. Hasta el momento tenemos 70 solicitudes de médicos, enfermeros, odontólogos, psicólogos y hasta de personal sanitario administrativo que quieren mostrar su rostro a los pacientes", agregó Ana.
- Para participar
Las hermanas Gil explicaron que esta propuesta, por el momento, está destinada al personal sanitario que se desempeña en las áreas Covid-19 de los diferentes centros de salud de la provincia. Y dijeron que para participar, el interesado debe enviarles fotos de su rostro, con buena iluminación y definición, y sonriente. También debe enviar su nombre y apellido, o sólo el nombre, y la ocupación. Estos datos estarán impresos en las fotos.
Las imágenes pueden enviarse por Whatsapp al 2644419175 (Ana Gil) o al 2644532808. También a través de la cuenta de Facebook ProMin Proveeduría Minera. Cuando la impresión está lista, los clientes son notificados para su retiro.