El 5 de mayo se celebra el “Día Mundial del lavado de manos” y desde el Servicio de Infectología del Hospital Dr. Marcial V. Quiroga se realizó una atractiva campaña para tomar conciencia de la importancia del lavado de manos. Este año, el lema fue “Prevenir la septicemia en la atención sanitaria”. Para ello, participaron la virreina del Sol, Florencia Valdez, y reinas departamentales, provinciales y nacionales de San Juan. Junto a enfermeras del nosocomio, personificadas con vestimentas antiguas, recorrieron los servicios y diferentes salas de espera promocionando y explicando el método correcto para lavarse las manos y destacando la importancia de realizarlo correctamente, ya que las manos limpias salvan vidas.
Se promocionó tanto el lavado de manos con agua y jabón, como el lavado en seco, que es mediante la utilización del alcohol. Las reinas y enfermeras, vestidas con trajes de distintas épocas, hicieron un recorrido por el Hospital Marcial Quiroga. Con alcohol en gel en mano y folletería al respecto, advirtieron lo importante de realizar el lavado de manos ya que previene infecciones y enfermedades.
El lavado de manos se debe hacer cuando uno considere que estuvo en contacto con algo que puede contaminar y por ende transmitir gérmenes. En casa, por ejemplo, hay que lavarse las manos luego de ir al baño, antes de tocar los alimentos y prepararlos. Mientras que en el hospital, se rigen los 5 momentos que promociona la Organización Mundial de la Salud (OMS) que son 1º: antes de atender al paciente, 2º: antes de realizar una tarea aséptica, 3º: después de estar en contacto con algún fluido corporal, 4º después de atender al paciente, y 5º: después de tocar algún objeto contaminado alrededor del paciente.
El lema para este 2018 fue “Prevenir la septicemia en la atención sanitaria”. Y esto en virtud de que la “sepsis” es la condición médica potencialmente mortal que se produce por el intento del organismo para combatir una infección, resulta en el daño de tejidos y órganos por el mismo sistema inmunológico. Esta respuesta caótica causa inflamación generalizada. En los casos graves, la presión sanguínea disminuye, múltiples fallos orgánicos sobrevienen, y el paciente puede morir rápidamente del choque séptico.