1- España impuso condiciones. De entrada los españoles “marcaron la cancha´ con su fútbol de toque fluido y asociado. A los holandeses les costó encontrar la pelota y asumieron un rol de partenaire. 2- Holanda endureció el trámite. Ordenados tácticamente y haciendo gala de una rudeza impropia de su estilo, los holandeses, equilibraron el control del balón y generaron sus opciones de contragolpe. 3- El campeón fue el mejor. Los cambios que introdujo Del Bosque, especialmente Navas y Fábregas, abrieron espacios en la defensa holandesa que permitieron plasmar en la red el dominio del nuevo campeón.
