Al principio el agua comenzó a salir un poco turbia de las canillas lo que sorprendió a los vecinos. Pero con el correr de las horas se interrumpió el servicio por completo. Sucedió en la localidad de Las Flores, Iglesia, donde 1.000 familias llevan una semana sin agua potable debido a un inconveniente en la planta potabilizadora que aún no lograron solucionar. Tanto desde el Municipio como desde el Ministerio de Desarrollo Humano y la empresa Barrick emprendieron un gran operativo para asistir a los vecinos con este líquido vital, al menos para el consumo personal.
Desde el martes pasado el pueblo no cuenta con el servicio de agua potable como consecuencia de una creciente, según explicó el presidente de OSSE, Sergio Ruíz, que se involucró en esta problemática pese a que la administración del servicio no depende de esta repartición, sino de la Unión Vecinal de Las Flores. “Quisimos cerciorarnos del origen del problema para aportar también a su solución. Todo se debe a que el barro y greda que generó una creciente ingresó en la planta potabilizadora y tapó todas las cañerías. El trabajo de reparación no es de gran envergadura, pero se retrasó por falta de equipamiento”, dijo Ruíz.
El funcionario dijo que el municipio de Iglesia contrató una máquina para limpiar la pileta y la tubería de la planta, pero que el vehículo no llegó. Por este motivo ayer OSSE envió una máquina y un camión especial para que realice esta tarea. Ruíz calculó que entre hoy y mañana ya estaría solucionado el suministro de agua en Las Flores, al menos para uso en higiene personal y en los sanitarios. Recién se habilitará para el consumo luego de que se realicen las pruebas de potabilidad.
Mientras tanto, tanto las autoridades nacionales como provinciales y algunas empresas privadas seguirán proveyendo agua a las 1.000 familias.
El Municipio manda camiones hidrantes con agua mañana y tarde para que llene los tanques de cada casa, mientras que distribuye más de 200 bidones de 20 litros de agua envasada entre la población. A estos se sumaron unos 4.500 bidones de 6 litros que aportó la empresa Barrick y los 1.000 dispensers con bidones que envió en Ministerio de Desarrollo Humano, según dijo Marcelo Marinero, intendente de Iglesia.
Algunos detalles
Stock permanente
Tanto en el CIC como en la Delegación Municipal en Las Flores se improvisó un depósito de bidones con agua envasada para que la gente retire cuando sea necesario. Ambos lugares funcionan mañana y tarde.
Daño colateral
La falta de agua potable también perjudicó la actividad turística en Las Flores. Los propietarios de cabañas tuvieron que cancelar las reservas que hicieron los turistas para el fin de semana largo.
Trabajo integral
El intendente de Iglesia, Marcelo Marinero, dijo que cuando se termine de reparar la planta potabilizadora de Las Flores, se hará un relevamiento por las otras 11 que hay en la comuna para corroborar su estado.