Néstor Kirchner pasó por el quirófano durante su presidencia cuando padeció una gastroduodenitis hemorrágica provocada por un calmante para el dolor que le provocó un tratamiento odontológico. El ex presidente estuvo poco más de dos semanas internado en 2004 en un hospital de Río Gallegos, en Santa Cruz. Esa operación estuvo supervisada por su médico personal, Luis Buonomo, quien hoy también se encontraba en el sanatorio de los Arcos al frente de esta nueva intervención quirúrgica. Previamente, había presentado síntomas de vomito, una baja de presión, además de rastros de sangre en la materia fecal, de acuerdo con el informe de su médico personal, Luis Buonomo.
