Desde noviembre pasado comenzaron a vivir un drama que los convirtió en noctámbulos y que les provocó pérdidas económicas y mucha angustia. Son unas cien familias que viven en el Barrio San Ricardo y en la Villa 12 de Octubre, en Rawson, que desde hace tres meses no tienen agua potable. Tras varios reclamos y pedidos de ayuda, ayer les restituyeron el servicio, pero sin poder usarlo para consumo.
Angélica Vázquez, una de las vecinas afectadas, contó que todo comenzó con la merma del agua durante el día. Dijo que esto los llevó a pasarse las noches en vela para recolectar la mayor cantidad de líquido posible. "Desde que empezó el problema hicimos los reclamos en OSSE, pero no tuvimos respuestas. Nos gastábamos el saldo de los celulares haciendo reclamos. Hicimos un grupo de Whatsapp entre los vecinos para que el que descubriera que salía un chorrito de agua en la madrugada avisara al resto para que juntara lo que pudiera. Así llevamos tres meses sin poder dormir tranquilos", dijo la vecina.
Por su parte, Patricia Mercado dijo que por la falta de este servicio se le "fundió" el lavarropas. Aseguró que lo hizo andar, aprovechando que salía un poco de agua. No se dio cuenta de que a los pocos minutos dejó de salir y el aparato siguió andando, por lo que se le rompió la bomba. "Todavía tenemos que ir a la casa de los familiares más cercanos a traer agua para tomar al menos. Es una vergüenza porque te cobran cada vez más caro por este servicio que cada vez está peor", dijo la mujer.
Tras la falta de una solución, los vecinos decidieron recurrir al municipio de Rawson. Dijeron que el miércoles y jueves pasados les enviaron un camión con agua potable para que llenaran bidones y demás recipientes. "Esto nos alivió la angustia un poco porque ya no nos alcanzaba la plata para seguir comprando agua envasada", dijo Santiago Morales.
Agregaron que el viernes pasado por la tarde, personal de OSSE llegó al lugar, hizo una excavación sobre calle Chacabuco, reparó "algo" y en seguida se restableció el servicio de agua. Pero que, hasta ayer, aún no pudieron usarla para consumo. "El agua sale turbia y con mal gusto. Nos dijeron que teníamos que dejarla correr hasta mañana (por hoy) para poderla consumir. Esperamos que así sea", dijo Morales.