Sumado al calor del domingo, cuando el termómetro trepó hasta los 42ºC, unas 4.000 familias de Rivadavia tuvieron que soportar la falta de agua potable. Ayer, la situación continuaba igual. Esto ocurrió porque el sábado pasado, obreros de una empresa que instala fibra óptica rompieron un caño matriz de agua. La zona afectada es la comprendida entre calle Arnobio Sánchez (barrio Rivadavia Norte), hasta calle Santa María de Oro, y de Libertador a Sargento Cabral (ver infografía).
"No podíamos ni llenar una botella de medio litro para beber. Fue muy duro, porque en los pocos surtidores donde caían gotitas, eran turbias", dijo Juan Jalife, que vive muy cerca de esa esquina. Otras personas de la zona contaron que tuvieron que comprar agua y hasta cargar bidones en casas de familiares para poder sobrellevar el agobiante fin de semana.
"Produjeron 3 roturas a lo largo de la cañería, la más importante fue en la esquina. La empresa no se hizo responsable y abandonó los trabajos", dijo Sergio Ruiz, el titular de OSSE y admitió que recibieron numerosos reclamos de los vecinos. Ayer, al cierre de esta edición seguían trabajando para solucionar el inconveniente.
El sábado, los problemas fueron menores. "Ese día empezó a salir poca agua, pero pensábamos que era por el calor", dijo Roberto Godoy, otro vecino de la zona. Sin embargo el domingo en la mañana, la popular esquina de Desamparados amaneció inundada.
Según dijeron el agua salía con fuerza del pavimento. Ahí hicieron reclamos y llegó la cuadrilla que hasta ayer trabajó sin parar. Para poder hacer la reparación debieron cortar varias llaves de la cañería. Así fue que gente de los barrios Rivadavia Norte, Fuva, Puyuta, y otros quedaron sin agua. "Yo tengo una pequeña cisterna y eso lo dejamos para usar en el baño. Para beber tuvimos que comprar agua", dijo Guillermo Ferreira, que vive a pocos metros de donde fue la rotura principal.
Ante este panorama, Ruiz explicó que tras el arreglo multarán a la empresa. "A nosotros nos deberán pagar todos los gastos que nos generaron. Pero lo lamentable es que a los vecinos no les van a devolver la amargura que pasaron hasta ayer", dijo.
Los vecinos
Eugenia Doncel – vecina
"Desde el sábado ya teníamos problemas, pero ayer y hoy fue insoportable. No tenemos ni una gota de agua y tuvimos que aguantar el calor del domingo. Es una vergüenza lo que nos están haciendo pasar".
Guillermo Ferreira – vecino
"Además de romper el caño del agua, en la puerta de mi casa perforaron una cañería de gas. Estuve todo el sábado sin poder usar la cocina. La empresa de la fibra óptica rompió todo y se fue como si nada".
Florencia González – vecina
"Lo peor de todo fue que sumó la falta de agua con un domingo agobiante. Fue muy duro pasar el día y no sabemos hasta cuándo estaremos así. En mi quiosco la gente compró mucha agua porque el día fue inaguantable".