Con más de 400 clubes registrados oficialmente en la Secretaría de Deportes y un centenar más que aún no se han inscripto como tales pero que funcionan en plenitud como instituciones deportivas, el deporte de San Juan está intentando acompañar desde la dirigencia la enorme apuesta que se hizo en infraestructura, eventos y programación. Es que una de las patas del andamiaje del deporte en la provincia ha quedado retrasada más que nada en la forma y no en el fondo respecto de lo que es imprescindible para el despegue definitivo.
La eternización en los cargos directivos, la falta de apertura a nuevas generaciones, la escasa preparación dirigencial y las especulaciones políticas han sido factores determinantes para que la dirigencia de San Juan quedara un paso atrás en este cambio propuesto. Involuntariamente, se han ido quedando y la renovación dirigencial no ha encontrado espacios ni tiempos como concretar ese paso indispensable, convirtiéndose hoy para la actual dirigencia en el desafío a concretar en el futuro inmediato. Cuesta creer que una simple renovación de autoridades en cualquier club demande intervenciones de Personería Jurídica para poder concretarlo cuando naturalmente la sucesión debería ser simple, consensuada y hasta pautada. Ese es el punto débil en el que los clubes resignan chances de crecimiento. El egocentrismo de dirigentes que se sienten eternos para un cargo, conspira contra sus instituciones y cuando reflexionan, suele ser demasiado tarde.
Otro aspecto conspirativo para los clubes está en la decidida de dirigentes que dejaron que el tiempo les gane agotando plazos de renovación, de asambleas, de rendiciones. En el presente, estar fuera de los papeles es no existir y esa mentalidad es la que la dirigencia sanjuanina está obligada a cambiar,
En cualquier institución las patas fundacionales son los socios, los dirigentes y sus deportistas. Un socio llega y participa cuando hay razones para hacerlo. Los deportistas se desarrollan cuando hay razones para hacerlo y la dirigencia es responsable absoluta de que todo esto suceda. En San Juan se inició ese proceso de hacer reaccionar, reflexionar y prepararse. Hay mucho para hacer, mucho por aprender pero el síntoma positivo es que la dirigencia entendió que para crecer hay que tener bases sólidas y así como se prepara a un deportista para competir, a los dirigentes se los debe preparar para conducir.
"Deben prepararse"
Desde su rol de responsable dentro de la Secretaría del contacto directo con todos los clubes de San Juan, Leonardo Flores es contundente en su diagnóstico y en el camino a seguir: ‘La dirigencia debe prepararse. Crecer en todos los sentidos porque ya no es folclórico el manejo de una institución. Hoy es necesario además de la pasión y el amor por ese club, tener argumentos administrativos para poder conducir. Desde la Secretaría de Deportes y con la Universidad Católica implementamos la Diplomatura en Gestión Deportiva y en el primer módulo, los 100 cupos disponibles se ocuparon. Quedaron muchos afuera pero eso fue síntoma de que hay voluntad de mejorar, ese es el camino y concientizar que los egoísmos de sentirse indispensables y eternos, sólo conduce al aislamiento dirigencial y termina condenando a los clubes. El mensaje es que en la preparación están las armas para ser mejor dirigente".
"Es muy difícil el presente"
En la contracara de la faceta dirigencial está hoy la Federación Sanjuanina de Fútbol de reciente fundación pero con la pujanza y la fortaleza de tener detrás a todo el fútbol del interior sanjuanino con 11 ligas afiliadas y más de 150 clubes. Nacif Farías, su presidente, sabe en qué están involucrados: ‘Es un momento muy difícil para ser dirigente de cualquier tipo de institución. No es sencillo acompañar la expectativa que genera tanta apuesta desde el gobierno porque faltan recursos. Siempre el dirigente quiere lo mejor y más para su club pero choca contra la impotencia de la falta de medios. Ahora tenemos que ser conscientes de que debemos gestionar y no quedarnos sólo en la espera de lo que nos den. Ese es el desafío y la dirigencia de San Juan lo asumió así. Preparándonos como se debe, actualizándonos de lo que hoy es clave y sabiendo que el orden es indispensable para poder avanzar. Hay mucho por hacer y queremos estar a la altura sintiéndonos parte de los proyectos’.