El camión de los bomberos llegó echando humo. El hombre que llevaba casco se bajó, se acercó al ascensor y para su sorpresa, pudo entrar en él, subir y bajar. Eso sucedió después de dos llamados telefónicos que avisaron a la Policía que una mujer se había quedado encerrada en el ascensor del Campanil de la Catedral. Es por eso que enviaron personal para que la rescatara.
Sin embargo, según Bomberos, sólo se trató de una broma.
La llegada de la autobomba llamó la atención de varios periodistas, que se acercaron para ver qué pasaba.
Mientras, un policía a bordo de una moto contó que una mujer se había quedado encerrada y que la habían salvado accionando un dispositivo de emergencia del ascensor. Por su parte, el encargado del Campanil, Armando Gutiérrez, aseguró que ninguna mujer se había quedado encerrada.
Fue el oficial de Bomberos, José Carbajal, quien llegó hasta el lugar y dijo que no había sucedido nada. ‘Alguien llamó a la Central de Policía para decir que una mujer se había quedado encerrada. Nosotros fuimos, comprobamos que el ascensor funcionaba y no vimos a ninguna señora. Todo fue una broma‘, comentó Carbajal.
