En una vivienda pequeña, con piso de cemento y con pocos muebles, Ariel Rojo, el flamante papá, recibe desde hace dos días pañales, leche y ropa de bebé. Es que desde que DIARIO DE CUYO contó en la edición del domingo que habían nacido trillizos y que su familia necesitaba ayuda, las donaciones se multiplicaron. La familia está agradecida por la colaboración y feliz porque los bebés evolucionan muy bien y es posible que pronto puedan llegar a su casa.
"Estamos muy contentos y agradecidos", comentó el padre de familia, que ya tenía 4 hijas, ayer cuando este diario fue hasta su casa, ubicada en el Barrio René Favaloro, de Chimbas. El objetivo era entregarle 17 bolsas de pañales y 13 tarros de leche que un empresario, que no quiso dar a conocer su identidad y que ya había ayudado a Jazmín (la nena de 8 años que necesitaba una mochila de oxígeno), donó para los bebés.
Como el empresario, muchas personas ayudaron a la familia Rojo. "Ha venido mucha gente a entregarnos cosas: empresarios, vecinos, gente de la Capital, medios de comunicación", contó Ariel. Y agregó que "se los agradezco de todo corazón, es una ayuda muy grande, pero yo no puedo vivir de la gente". Es que el hombre trabaja como albañil en un barrio en construcción, pero la obra finalizará pronto y quedará desocupado. "Necesito un trabajo estable, con obra social, para que mis hijos estén bien. No me importa trabajar todos los días, no me importa si tengo que trabajar los domingos, pero quiero darles una buena vida", cuenta el hombre. Y dice con preocupación que no tiene heladera y que la va a necesitar para guardar los medicamentos. Y que su mujer, Marisa Páez, ya no va a poder trabajar en la cosecha para ayudarlo.
Pero su cara de preocupación cambia por una sonrisa al decir que fue a ver a sus bebés (que ayer seguían internados en un sanatorio) y que están muy bien: "Son idénticos, se parecen a la mamá. Los tres respiran por sus propios medios y los cuidan muy bien". Y cuenta que ya eligieron el nombre que tendrán los varones: Erick y Axel. Y que el de la nena todavía está en discusión, "la mamá tendrá que elegir porque todavía no sabemos si se va a llamar Araceli o Asahí", dice.