Dos de los tres hermanos Romero -Emiliano y Mariano- se mostraron felices tras la nueva victoria. “Otra vez fue muy difícil, pero supimos reaccionar y metimos los goles en los momentos justos. Estamos arriba en la serie pero esto todavía no termina. Banco Mendoza es un gran equipo y hay que respetarlo”.
Su hermano Mariano aclaró a su vez que “me costó mucho, sobre todo los primeros 10 minutos. Tuve un problema en el aductor derecho. Y volví con amor propio y esfuerzo. Lo teníamos dominado pero hicimos mucho desgaste y desperdiciamos muchas chances. Cuando uno no hace los goles te los hacen a vos. Y después gracias a Dios nos ayudó en el alargue el Nolo, como siempre. En ese momento no sabés que hacer. Estamos cerca pero a la vez lejos. Tenemos que tranquilizarnos y jugar bien el tercero. Si se da, que se de allá, pese a que nos gustaría festejar con nuestra gente”.