Con la idea de ampliar los cupos y optimizar los entrenamientos de la escuela de hockey sobre césped del complejo el Palomar, la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) sumó la construcción de una nueva cancha reglamentaria para la práctica de ese deporte. Así, según dijo Lucas Molina, secretario de Bienestar Universitario, se trata de una cancha de arena con césped sintético "apta para todo tipo de competencias nacionales", la que va a permitir "mejorar el nivel de competitividad que hay en la provincia" porque hasta el momento solo tenían una.
Molina comentó que la construcción se finalizó la semana pasada, pero que aún falta que se asiente la superficie y se cepille la alfombra, por lo que calculan que, "en dos semanas máximo, se podrá empezar a usar para entrenamientos", dado que, para que esté apta para competencias, aún falta que se coloquen los cerramientos reglamentarios. El secretario indicó que, para la construcción, se empleó a profesionales que estudiaron la densidad del suelo para ver si se podía llevar a cabo la obra, ya que, antes, en el lugar había una cancha de fútbol. Por eso, Molina dijo que primero se levantó el césped, luego se hizo una remoción de la tierra y se rellenó con el material necesario para ese tipo de infraestructura, por lo que después de varios meses de trabajo arduo, la semana pasada terminaron de colocar la alfombra sintética y realizaron las uniones. Además, señaló que se trata de una obra de gran importancia para la provincia porque está preparada para recibir torneos nacionales. No obstante, resaltó que no es adecuada para competencias internacionales como un partido de la selección argentina de hockey sobre césped.
En ese marco, el funcionario universitario manifestó que la obra tuvo un costo de "$150 millones". Si bien dijo que la mayor parte de los fondos salieron de las arcas universitarias, explicó que se trata de un "sistema mixto", ya que desde el año pasado se cobra una "cuota cancha" y, de ahí, la universidad recupera la inversión. Asimismo, resaltó que los padres que forman parte de la institución están comprometidos con la obra y, a lo largo del año, han realizado actividades con el fin de colaborar con el dinero que se necesita. Así, destacó que ahora se encuentran juntando fondos para cooperar con la construcción de las barandas que le darán las características reglamentarias para recibir torneos nacionales.
Molina señaló que la cancha que hay actualmente tiene una ocupación de 600 jugadores, por lo que contar con un nuevo lugar para poder entrenar les va a dar la posibilidad de descomprimir los entrenamientos y duplicar la capacidad "porque estábamos muy saturados y teníamos que dividir las canchas en dos o, algunas veces, hasta en tres sectores", lo que dificultaba la calidad de los entrenamientos. Además, explicó que esto también les va a permitir recibir más jugadoras y "desarrollar la rama masculina, que viene en un crecimiento muy importante".
Entre las mejoras que se vienen dando, el secretario mencionó que están trabajando en sumar nuevas zonas del complejo con iluminación. Así, contó que ya se realizó la instalación de luminarias en el estacionamiento y que los próximos lugares a poner a punto con luz serán una calle interna que linda con el costado norte del predio y una segunda cancha de tenis. En ese marco, agregó que también adquirieron equipamiento lumínico para una cancha de pádel.