‘Una de las cosas más lindas que tienen esta jornadas es que además de ayudar pasamos momentos inolvidables’, dijo María de los Angeles. La joven es una de los 20 chicos que con ayuda de las autoridades de la Escuela Amable Jones, de Santa Lucía, pintaron 15 pizarrones como acción solidaria.
Aprovechando el receso escolar, los jóvenes que pertenecen a una agrupación política empezaron su tarea cerca de las 9. Concentrados, algunos lijaron las paredes mientras que otros pusieron enduido en las partes más deterioradas. Y en botellas cortadas, los más expertos prepararon la pintura que compraron de sus bolsillos. ’Le damos sólo una mano a cada pizarrón porque la pintura está bien pura’, dijo David, que además explicó que algunos materiales fueron pagados por la Cooperadora de la Escuela. No les importó mancharse las manos y la ropa. Es por esto que entre charlas, mates y facturas los jóvenes, algunos ex alumnos de la escuela, pintaron 15 pizarras.
Esta idea surgió hace unas semanas, cuando los chicos construyeron dos rampas en la misma institución. ’Nos acercamos porque nos enteramos que tenían un alumno que asiste en silla de ruedas y no había rampas de acceso’, dijo Lucio Rodríguez, una de las cabezas del grupo. Durante la construcción de las rampas decidieron dar otra mano pintando los pizarrones.