“Tenemos las orejas y los ojos bien abiertos y vamos a abrir las puertas de par en par para que los trabajadores tengan el lugar que se merecen. Pero a las palabras necias le vamos a hacer oídos sordos porque no nos interesan los agravios”.
“Tenemos las orejas y los ojos bien abiertos y vamos a abrir las puertas de par en par para que los trabajadores tengan el lugar que se merecen. Pero a las palabras necias le vamos a hacer oídos sordos porque no nos interesan los agravios”.