El presidente de Perú, Ollanta Humala, se sumó ayer a la partida del Dakar, que se dio por primera vez en su país. Humala cruzó la rampa de largada manejando una camioneta roja con decoraciones alusivas a la competencia, en la que incluso figuraba su nombre, en compañía de su esposa. “Es un evento importante, bastante mediático y que fomenta un deporte bastante extremo, bastante duro. Estamos demostrando que en el Perú también hay terrenos difíciles como en el norte de África”, declaró Humala. Es la segunda vez que el Perú participa del Dakar, el año pasado albergó el tramo final de la competencia y la Plaza de Armas de Lima fue el escenario del podio de llegada.