La prueba de ADN será clave para la suerte del empleado detenido ayer. Si ese examen revela que es padre de la nena de su hijastra, podrá enfrentar cargos por abuso sexual agravado por la minoría de edad de la víctima y por estar a cargo de su guarda. Las penas por esos ilícitos van de los 8 a los 20 años, pero la escala sería mayor si también se confirma que abusó de su propia hija, estimaron ayer fuentes judiciales.
