El Monumental tuvo un colorido especial en una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino con una tremenda bandera gigante rojiblanca que estrenaron los hinchas de River Plate cuando salió el equipo de Juan José López a jugar con Boca Juniors. La parcialidad boquense tomó partido del comprometido promedio de River en la temporada y muchos hinchas visitantes se disfrazaron con capas blancas de fantasmas con una “B” negra en el pecho. La gran bandera riverplatense, inédita en la Argentina por sus dimensiones (6.350 metros de tela fueron necesarios para realizarla) tiene pintadas a las Islas Malvinas y un número 14 y una damajuana de vino enrollada en cintas argentinas, con la inscripción Los Borrachos del Tablón, nombre de la barrabrava de River. Para este trapo, se utilizaron 200 litros de pintura y tuvo un costo aproximado de 300 mil pesos, suma a la que se llegó con la ayuda de varios jugadores del plantel. Además de la impresionante bandera que se desplegó desde la popular Sívori, los simpatizantes de River adornaron su cancha con humo y globos largos rojos y blancos. Este cotillón y el papel picado utilizado para la recibir al equipo, fueron guardados el lunes en las tribunas del estadio y varios dirigentes temían que la policía se los confisque por haberlos ingresado antes del encuentro. Otro condimento de color fueron las muñecas inflables morochas con camisetas de Boca que instaló River debajo de la tribuna Centenario, debajo de la parcialidad visitante. En el partido de Reserva, que ganó Boca 1-0, el árbitro Rodrigo Profundi, amagó dos veces en parar el juego por los cánticos discriminatorios de los hinchas locales hacia los boquenses. Desde la tribuna Sívori salió el grito: “El que no salta es de Bolivia y de Paraguay”, que duró hasta que el juez intentó suspender el cotejo. La barra brava de Boca llegó al Monumental en diez micros y delante de ellos les abría el paso un Torino y un barquito, los que se utilizan generalmente en los centros turísticos para los chicos, pintados de azul y amarillo. El micro, donde llevan las banderas, fue un móvil totalmente azul, con el número 12 en los laterales y la leyenda “La Barra de Mauro”.
