La figura del actual ministro de Obras de Chile, Laurence Golborne, que se reunió ayer con el gobernador Gioja y que asumió ese cargo hace 10 días, tomó una dimensión sin precedentes cuando ocurrió uno de los hechos más conmocionantes de la última década: Los 33 mineros atrapados bajo tierra en una mina de Copiapó.

Por entonces era ministro de Minería y se ocupó de diseñar el operativo de rescate. Sobre su espalda pesó la responsabilidad de armar el plan para llegar al lugar exacto donde se encontraban sepultados.

Su popularidad casi que opacó la figura del propio presidente Piñera y en las actuales circunstancias que atraviesa el vecino país, con protestas estudiantiles que tienen en vilo a la población, Golborne es el hombre dentro del gabinete con mayor reconocimiento.