Apenas traspasaron el portón, revolearon mochilas y libros. Algunos, los más tímidos, se quedaron "nada más que para mirar", según dijeron, pero igual resultaron mojados por las salpicaduras de sus compañeros. Los chicos de Tercer año de secundaria de la Universidad Católica de Cuyo decidieron festejar el fin de clases con un remojón en el canal que corre por Avenida Ignacio de la Roza y que pasa justo frente al predio universitario.
El día de calor ayudó a la iniciativa y bien pronto, eran varios los que se animaron a entrar al agua. Algunos, más precavidos, habían llevado bermudas para bañarse, pero otros apenas se alivianaron un poco del uniforme verde que vistieron todo el año y se zambulleron igual.
"Les decimos que no hagan eso, que es peligroso, pero siempre hay algún grupito que para el fin del ciclo lectivo se mete al canal. Y esperan al final, para que no los sancionen", contó una fuente de la institución. Los chicos de otros cursos festejaban el chapuzón y algunos hasta sacaban fotos con sus celulares.
"Los de la Escuela de Comercio y la Industrial, siempre se tiran a la fuente de la Plaza Aberastain. Los del Nacional, se van a la Plaza 25. Y nosotros, acá", explicó uno de los chicos, mientras ponía a salvo su MP4 en la mochila para evitar que se mojara. "Las clases se terminaron, ahora viene la época de recuperar y después, solamente vienen los que se llevaron materias. Por eso festejamos, porque es el último día que vamos a estar todos juntos", afirmó una chica, que solamente optó por meter los pies en el agua.
Después de un rato, y ante la presencia de una preceptora que se acercó peligrosamente según lo definían los propios chicos, salieron del canal. Chorreando agua, pero contentos por haber cumplido el ritual de festejar con un remojón el final de las clases y la cercanía de las vacaciones escolares.

