Según el proyecto, los factores a tener en cuenta son:

* Emplazamiento: Antes de comenzar la construcción de un invernadero elegir cuidadosamente su emplazamiento y las condiciones ambientales,

* Topografía: Se debe seleccionar un terreno bien nivelado o con poca pendiente debido a que los terrenos situados en pendientes empinadas, con perímetro irregular, aumentan la dificultad y el costo de la edificación, además de otros factores como temperatura, iluminación y ventilación. Debe tener acceso a una buena carretera para facilitar la comercialización.

* Iluminación natural: Es uno de los factores más importantes en el crecimiento de las plantas. El invernadero puede ser iluminado con luz solar directa o con luz artificial. La cantidad de luz disponible en los invernaderos puede constituir un factor limitante para el crecimiento de las plantas, especialmente durante el invierno.

* Agua: El agua juega un papel muy importante para la elección del emplazamiento de los invernaderos. El agua debe ser limpia y libre de organismos que pudieran causar enfermedades o plagas, también debe estar libre de agentes químicos indeseables. Para mayor seguridad, el agua que se use debe ser previamente analizada.

* Orientación: La cantidad de energía solar recibida por una superficie depende de la estación y de las condiciones ambientales predominantes en el área y en el momento (humedad, nubosidad, etc.). En los invernaderos con orientación este-oeste se transmite mejor la iluminación invernal que en la orientación norte-sur. Los invernaderos construidos en las regiones del sur con una orientación este-oeste dan muy buenos resultados para la germinación y crecimiento de las plantas; lo contrario ocurre con la orientación norte-sur que es propicia para las regiones del norte.

Actualmente, en la mayoría de los países, faltan los coeficientes de seguridad propios, que hay que tener en cuenta para la construcción de los invernaderos y se usan los coeficientes de seguridad establecidos para la construcción de edificios.