Fernando Hugo Malla (43), detenido ayer por policías de Robos y Hurtos, era agente y su último destino fue el Comando Radioeléctrico cuando sus mismos colegas lo atraparon la tarde del 6 de noviembre de 2000, luego de una corta persecución en calles del microcentro. Su captura se produjo instantes después que ingresara con su uniforme y su arma reglamentaria a la financiera Predim, en Tucumán metros al Norte de Mitre, Capital, donde redujo a un empleado y robó unos $20.000 y cheques por $9.000. Aquella vez se sospechó que había actuado con otro policía en ese y otro asalto más en Rivadavia, pero al cabo de un juicio el tribunal de la Sala II de la Cámara Penal sólo condenó a Malla a 6 años y 6 meses de prisión el 26 de julio de 2002.
