Los niños no soportaron la tentación de tocar a Domingo Faustino Sarmiento. Una leve pestañeada del personaje los hizo sospechar que no se trataba de un busto de bronce como se podía apreciar a simple vista. No se equivocaron. Era una estatua humana, al igual que Evita y San Martín, que se ubicaban a su izquierda. Después del descubrimiento, los chicos se animaron a saludarlos con un apretón de manos y a tomarse una foto junto a ellos. Tentación que ni el gobernador de la provincia, José Luis Gioja, pudo contener. Es que estos artistas le dieron un toque de color a la Fiesta del Sol en el Predio Ferial, lugar donde se los podrá ver hasta pasado mañana.
"Espero que me saluden más seguido así puedo moverme un ratito", dijo a DIARIO DE CUYO el hombre que representaba a Sarmiento. Llevaba más de una hora inmóvil, sólo permitiéndose pestañear cuando ya no podía soportar el ardor en los ojos. Este comentario hizo sonreír a Evita, que llevaba mucho tiempo sin bajar el brazo derecho, levantado en señal de saludo. Más aliviado estuvo Martín Fierro, que alternaba posiciones de tanto en tanto para posar tocando la guitarra o tomando mate. Personaje que, además, incluía regalos para el público. Quienes adivinaran de quién se trataba, participarían de un sorteo de productos regionales. En menos de diez minutos, la urna quedó repleta de papelitos con la respuesta de la gente.
Las estatuas humanas se ubicaron a lo largo del predio, recibiendo el reconocimiento de todos los presentes, incluidos los funcionarios. El gobernador Gioja saludó a cada uno de los personajes, pero se detuvo por más tiempo frente a Evita, a quien le dijo "vos seguís viva para los argentinos".