A puro suspiro transcurrió la hora y cuarto que duró el espectáculo de David Bisbal, en la noche de apertura de la Fiesta Nacional del Sol. Apenas unos minutos habían pasado de la medianoche, la espera llegó a su fin, cuando el español arrancó con Tú y yo. En su primera vez en San Juan, Bisbal se mostró cariñoso con las mujeres del público, las hizo cantar y derrochó “te quiero” y besos para las más eufóricas.

Luego fue desglosando su repertorio, haciendo frente al viento, intenso por momentos, que soportó sin borrar la sonrisa, y sin hacer ni una referencia al clima. Vestido de negro, desplazó su menuda figura por el escenario. Habló, saludó, y agradeció los aplausos varias veces. Era casi la una de la madrugada cuando cantó una seguidilla de hits que empezó con la balada Dígale, logrando encender a la platea, marcadamente femenina. ‘He tenido suerte y se han escuchado en algunas novelas, esta es la prueba de fuego a ver si las vieron, cantemos como en un karaoke, ¿vale?’, invitó el cantante e interpretó el tema Herederos de una pasión, enganchada con Hasta el final, ambas novelas de El Trece. La tanda cerró con Hoy, que popularizó Marcelo Tinelli el año pasado y cuyo video protagoniza Eugenia La China Suárez, su novia (¿aún?). Sin ningún tipo de mención a su vida privada, el artista, que evitó tener contacto con la prensa local, interactuó mucho con el público, les deseó suerte a las candidatas y recibió un vino de regalo. Terminó de conquistar a las sanjuaninas cuando lanzó un ‘me enamora San Juan’. El vínculo estaba sellado y prometió volver.

Lo bueno, si breve, dos veces bueno, dice el dicho y así fue el concierto: efectivo y prolijo.

Al cierre de esta edición, se esperaba la actuación de Abel Pintos, como número central y uno de los más convocantes, de la segunda jornada del festejo más importante de los sanjuaninos.