Lo primero que debemos tener en cuenta es el clima. Por supuesto que tenemos una época en el año para realizar esta tarea y en nuestra provincia se efectúa a partir del 10 de julio, cuando el frío está instalado. El rosal está en descanso, porque su savia bajó. Las horas de frío acumuladas son una cuenta necesaria para el rosicultor o jardinero. Por regla general es preciso contar entre 700 a 800 horas frío acumuladas. No se debe podar con viento zonda, ni lluvia.