Más relajada, y verborrágica -excepto con la prensa- se mostró ayer por la tarde la ministro de Industria de la Nación, Débora Giorgi, cuando visitó dos industrias sanjuaninas ubicadas en Santa Lucía: Por un lado, la fábrica de abrigos Ansilta y por el otro, la fabricante de manojos de cables para la industria automotriz, TCA. Entre ambas firmas, suman unos 750 trabajadores los que ocupan.
En Ansilta, la funcionaria nacional no ocultó su curiosidad por conocer las cualidades que tiene la tela para que sea abrigada pero a la vez liviana. Fue así, que su propietario Alberto Graffigna, la invitó a que se calce un par de guantes: uno confeccionado en tela térmica y el otro en nylon, ambos impermeables claro, pero como era de esperar el de plástico condensó la humedad y la ministro reconoció las diferencias. El gobernador Gioja, no se quiso quedar atrás y ahí nomás pidió un par para él y de esa manera comprobó personalmente cómo era el comportamiento de un material y otro.
