La hidratación del organismo es fundamental ante las altas temperaturas que predominan en el verano, las cuales pueden provocar golpes de calor que ponen en riesgo la salud.

Mónica Katz, especialista en Nutrición de la Universidad Favaloro, sostuvo que ‘básicamente, ante las altas temperaturas hay que ingerir líquidos y comer alimentos que los contengan como las frutas o las verduras o aquellos denominados esponjas, que son los que absorben agua como las pastas o el arroz‘. Katz puntualizó que ‘no hay que bajar de entre los 8 y 10 vasos de líquidos diarios a ingerir en verano, porque cuando llega la sed es tarde y significa que hay algún grado bajo de deshidratación‘. La especialista añadió que ‘en lo que también hay que prestar atención en verano es en no cortar la cadena de frío de los alimentos, sobre todo cuando se llevan alimentos a la playa‘.