En un aula improvisada en el comedor, la maestra toma el marcador y explica las palabras graves, agudas y esdrújulas. Afuera, la cinta por la que corre la basura se mueve constantemente. Y ellos, en vez de estar clasificándola, están tomando clases. Así, divididos en grupos, 36 operarios del Parque de Tecnologías Ambientales, que iban a recolectar chatarra y alimentos cuando el predio era un basural gigante, aprenden a leer o intentan terminar el Nivel Primario.
Según comentaron desde el parque, de las 63 personas que estaban en el basural y fueron incorporadas a la planta, quedan 37. Después de haberlos adaptado al trabajo, los encargados del parque decidieron que era momento de capacitarlos, ya que la mayoría sólo cursó los primeros años de la primaria y eso los limita a la hora de trabajar.
Las clases, que los operarios deben tomar obligatoriamente, se dictan 3 veces por semana. Hay 2 grupos. Uno estudia dentro del plan Fines, está integrado por 19 personas que no terminaron el ciclo primario. El otro, integrado por 17 personas que no saben leer ni escribir, está inserto en el Programa de Alfabetización.
Noelia Quiroga, una de las maestras, contó que “lo que más les cuesta es Lengua, porque la mayoría de ellos son muy cerrados y se rehusan a expresarse”. Y agregó que “es difícil porque, además de enseñar las materias, hay que enseñar modales y lograr la socialización. Por otro lado, todos son muy responsables, nadie llega sin la tarea hecha”.
El dictado de las clases comenzó en septiembre pasado y a finales de este mes se recibirá el grupo que está terminando el Nivel Primario. Luego, comenzarán a estudiar otros 11 operarios.

