Debido a las bajas temperaturas ocurridas hace unas semanas, el Hogar Teresa de Calcuta, dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano, amplió sus prestaciones para beneficiar a más hombres en situación de calle. Ahora no sólo le da alojamiento por la noche y cena a los indigentes, sino también asiste con comida a los hombres que sí tienen donde vivir, pero que la plata que ganan no les alcanza para comer.

Algunos concurren a esta institución únicamente para cenar, mientras que otros sólo lo hacen para retirar una vianda. Hugo Ruíz tiene 57 y sobrevive con una pensión de 2.500 pesos mensuales. Como ese dinero sólo le alcanza para pagar el alquiler de la habitación donde vive, comprar los remedios que toma para el corazón y comer sólo dos semanas, decidió buscar ayuda en el hogar estatal donde ahora cena todas las noches. ‘Durante este invierno nos encontramos con algunos casos especiales como el de hombres que si bien no son indigentes ni viven en la calle, necesitan comida. Por eso decidimos darles cena tanto para que consuman en el Hogar como para que se lleven a sus casas. Las viandas incluyen el plato principal, el pan y el postre, tal cual se sirve aquí’, dijo Estela Cejas, directora del Hogar Teresa de Calcuta.

La funcionaria agregó que en promedio, durante el invierno, suelen asistir al Hogar unos 8 indigentes que además de cenar se quedan a dormir. Dijo que este año son 12 a los que se suman 4 hombres más que sólo van en busca de la cena. También agregó que esta medida de darle cena a hombres que no están en situación de calle se aplicará durante lo que resta del invierno, pero no descartó que siga vigente.

El Hogar Teresa de Calcuta está destinado a dar alojamiento, cena con postre incluido y desayuno a los hombres que viven en la calle y que no disponen de un lugar digno donde dormir, sin distinción de edad. El único requisito que deben cumplir para acceder a este beneficio es bañarse y usar ropa limpia, requisito que también deben acatar los hombres que sólo van buscar la cena.