Casi desde sus inicios y siempre bajo la gestión de Daniel Sanna, el Sindicato Médico ha emprendido un fuerte plan de lucha contra el Gobierno provincial y el conflicto parece ser el dueño excluyente de la escena. La disputa actual está precedida por una larga lista de enfrentamientos: por los llamados a concurso, por la designación de personal, por los incrementos de sueldos y por la distribución de los fondos provenientes de la autogestión hospitalaria, entre muchos otros. Además del funcionamiento del Servicio de Maternidad del Rawson, el sindicato que encabeza Sanna está hoy en pie de guerra por el Urgencias del mismo nosocomio. Los jefes de Guardia del servicio vienen de renunciar a cumplir esa función, exigiendo que se designe un jefe en forma permanente. Una de las pocas veces que el gremio aceptó un ofrecimiento oficial fue durante la última negociación salarial. La gestión giojista les dio a los médicos el mismo aumento que al resto de los estatales, pero también se hizo eco de un histórico reclamo y les concedió un adicional por antigüedad. Se pensaba que eso limaría asperezas, pero no fue así.
