Las elegidas. Dana Ríos y María Eugenia Balmaceda, Embajadoras mineras, dijeron que están comprometidas en difundir las bondades de esta actividad.

 

Una es oriunda de Los Berros y tiene 20 años, la otra es de Divisadero y tiene 21. Ambas sarmientinas crecieron en el seno de familias que vivieron en carne propia el sacrificio de trabajar en la actividad que fue el motor económico de estos pueblos. Es por esta razón que conocen muy bien cómo la misma fue evolucionando y hasta se atreven a realizar algunas propuestas para mejorarla aún más. Son Dana Ríos y María Eugenia Balmaceda, quienes anteayer fueron electas Embajadora y Embajadora II del Trabajador Minero, respectivamente. En una entrevista con DIARIO DE CUYO dijeron que la minería debe incluirse como orientación en la escuela para que los chicos se capaciten en el tema y para que se le dé el valor que merece.

Dana, estudiante de Abogacía, sostuvo que la minería se convirtió en la principal actividad económica de San Juan y que es necesario estar capacitado para ingresar a este mundo laboral. Y que por eso se la debe incluir como orientación en el secundario. ‘En Los Berros está creciendo esta actividad con pequeñas empresas que ofrecen una alternativa laboral. Por eso creo que es indispensable que la minería se incluya como una orientación más en el secundario para que los chicos conozcan del tema y hasta sientan la vocación de trabajar en este sector’, sostuvo la Embajadora.

Lo mismo opinó María Eugenia. Ella cursa la carrera de Ingeniería en Minas. ‘La minería brinda muchas opciones laborales que no sólo pasan por la explotación y muchos las desconocen y, por lo tanto, las desaprovechan. Por eso creo que la minería se debe incluir como orientación escolar, pero también realizar talleres de capacitación periódicamente y para la población en general porque todos tienen posibilidades de ingresar al sector y con las mismas posibilidades’, dijo la Embajadora II.

" Las grandes empresas mineras deben continuar con el compromiso social de ayudar a la comunidad a la que pertenecen”.

Dana Ríos / Embajadora de la minería

 

 

Mi sueño es conocer Veladero y trabajar en minería toda mi vida porque me apasiona y es una tradición familiar".

María Eugenia Balmaceda / Embajadora II de la minería

 

Tanto Dana como María Eugenia opinaron que no se discrimina a la mujer en la actividad minera. Que así como trabaja a la par del hombre picando piedras, también puede ascender de puesto. “Mi padre y tíos eran los encargados de construir los hornos caleros tradicionales, mientras mi abuela atendía un comedor para los choferes mineros.

En este ambiente creció mi mamá, que dice que todo lo que logró se lo debe a la minería. Lleva 25 años trabajando en el rubro y gracias a esto pudo criarnos a mi hermano y a mí, siendo madre soltera, comprar una casa y darnos educación. Empezó desde abajo y ahora es la encargada de contratar el transporte para sacar la producción de cal hacia otras provincias”, dijo Dana.

Las mujeres en la familia de María Eugenia también trabajaron duro y a la par de los hombres en las caleras de Divisadero.

“Mi abuelo era maquinista y mi abuela partía piedras y cargaba camiones. Mamá empezó en la trituradora y ahora está en Recursos Humanos de la empresa. Hace 20 años que trabaja en minería. Y yo crecí mamando esta actividad, por eso elegí la carrera de Ingeniería en Minas para continuar el legado”, dijo la joven.

En cuanto al futuro de la minería en la provincia, nuevamente las embajadoras coincidieron en que es “prometedor” sobre todo por los nuevos proyectos que se avecinan, como Josemaría, en Iglesia.

Dana sostuvo que no conoce mucho sobre este proyecto, pero sí que ofrecerá varios puestos de trabajo que para ella, es lo más importante. Lo mismo dijo María Eugenia, aunque agregó que Josemaría es uno de los proyectos de explotación de cobre más importante del país que apuntalará la economía de la provincia, bajo un estricto control de las normas que debe respetar.

“Creo que no hay posibilidades de que una empresa tan grande viole las normas porque tiene que obtener innumerables permisos para trabajar y someterse a controles permanentes, incluso de la propia gente”, dijo la Embajadora II.

Al respecto, María Eugenia dijo que está ‘muy de acuerdo” con las jornadas de minería abierta al público que organizan el Ministerio de Minería y las empresas mineras en las diferentes comunidades para informales a los vecinos sobre esta actividad. ‘La gente debe saber que la minería está presente en cada cosa que utilizamos, aunque ni lo imaginemos”, sostuvo la joven.

 

  • Fiesta y elección

Dana Ríos y María Eugenia Balmaceda fueron electas Embajadoras de la minería en la Fiesta del Trabajador Minero y de la Minería que se realizó el fin de semana pasado en Los Berros, Sarmiento. La elección de la Embajadora se realizó alrededor de las 3,30 de la madrugada del domingo.