Llevaron hasta el mate. Buscaron el mejor lugar para observar y no se perdieron un detalle. Apostados en el balcón que hay en el sector Sur del Centro Cívico, pudieron ver cómo las toneladas de hierro fueron elevadas por tres imponentes grúas. Así, alumnos de la escuela Industrial, de la especialidad Construcciones, fueron testigos de uno de los momentos más atractivos de la colocación del puente que une el Centro Cívico con la Plaza del Bicentenario. Pero no fueron los únicos observadores. La gente que caminaba por el lugar se detuvo durante varios minutos para ver la titánica tarea que realizaron los operarios.
De este modo ayer, el puente quedó colocado y se finalizó con el montaje grueso del mismo. Por eso, el tránsito vehicular tuvo que ser interrumpido desde la semana pasada, en el tramo de avenida Central, entre España y Las Heras. La idea es que hoy todo vuelva a la normalidad.
La mole de hierro no pasó desapercibida ayer. Mucho menos las grúas encargadas de elevarla hacia el cielo. Así se concluyó esta etapa. Lo que queda ahora son los detalles finos como la colocación del piso de madera, las barandas de vidrio y de hierro, además de la iluminación para que este puente se convierta en otra atracción arquitectónica ubicada en un sitio clave. Este es el primero de varios puentes que buscan construir en la ciudad. Se estima que esté listo en un mes.
Imponente
100
toneladas de hierro fueron utilizadas para armar la estructura del puente de estilo inglés. Imita a los del ferrocarril.
La construcción del puente de hierro, con estilo de los que se usaban para los ferrocarriles, se hizo en el Parque Industrial de Albardón. Luego fue trasladado en partes hasta donde se acaba de colocar. Los operarios tuvieron que unir todas las piezas al ras del suelo, algo que les llevó poco más de una semana. Desde el sábado pasado comenzó la tarea de elevar la estructura que fue diseñada para ser armada en dos tramos. En un primer momento se dijo que el puente iba a estar listo el pasado 11 de septiembre, sin embargo hubo problemas con la grúa y la tarea que en principio duraría 30 horas, se extendió. Sin embargo, ayer, a contra reloj, los operarios trabajaron desde temprano. Lo hicieron como si estuviesen en un enorme escenario donde fueron observados atentamente por la gente que pasaba por el lugar y se paraba para tomar fotos.