Son así. Viven el fútbol a su manera y más aun cuando Boca está enfrente, los Mellizos Barros Schelotto se potencian. Al menos eso mostraron en el Bicentenario. Estallaron en reclamos con el penal de Boca y luego, con las dos expulsiones, no se guardaron nada en su pelea contra Saúl Laverni, incluso en el final cuando Gustavo cruzó toda la cancha.