Que la imagen de San Pedro hoy se encuentre en la capilla que está frente a la plaza de Astica, en Valle Fértil, no fue producto del azar ni de una promesa. Hace exactamente 100 años, el pueblo se reunió y sometió la decisión a una votación. La propuesta que sacó más votos fue la de colocar al santo en el predio de Alto Astica. Y es donde permanece desde entonces. Hoy se cumple un siglo de la llegada del patrono de la localidad vallista, justo para la festividad de San Pedro y San Pablo. Es por eso que las mujeres organizaron para esta noche un fogón como los que hacían antaño. La celebración culminará el próximo 3 de julio con una procesión.
La imagen es imponente. San Pedro con una capa roja está sentado en un sillón de algarrobo que pesa casi 20 kilos. De una de sus manos cuelga un manojo de llaves. El santo se ve joven. Tiene barba negra y mejillas rosadas. Los lugareños dicen que no se parece a ninguna de las imágenes de San Pedro que suelen aparecer en las estampitas. Por eso dicen que es único. El camino que tuvo que recorrer la imagen para llegar a Astica no fue fácil ni corto. Lo construyeron en Catamarca y pasó por La Rioja antes de llegar a su destino final. No está claro quién lo mandó a traer o si se trató de una promesa, lo que se sabe es que llegó al pueblo un 29 de junio.
Entonces, el conflicto surgió entre los pobladores que vivían en Alto Astica y los que estaban en el Bajo Astica. Ambos sectores querían tener el santo. La votación fue el método que encontraron para resolver la pugna. Pero sólo pudieron votar las personas que habían donado chivos o gallinas en nombre de San Pedro. Así fue que por mayoría, la imagen de San Pedro se quedó en el Alto Astica, hoy el corazón de la localidad. Una familia Acosta donó el terreno para que se construyera el templo, que fue levantándose gracias a la colaboración y la donación de los pobladores de todo Astica. Mientras la capilla se construía, la imagen estuvo en el oratorio que tiene el cementerio de la localidad vallista.
La costumbre de donarle animales a San Pedro se arraigó inmediatamente, según contaron los pobladores del lugar. Dicen que a mediados de los años "50, el santo tenía más cabezas de ganado que cualquier puestero de Astica. Incluso, los animales eran marcados con un sello especial. Entre los habitantes del pueblo se turnaban para cuidar estos animales. Pero con los años la tradición fue desapareciendo. Del mismo modo que las festividades que se hacían en su honor durante todo el mes de junio. Esta tradición es lo que buscan rescatar las mujeres de Astica, por eso organizaron un gran fogón para celebrar los 100 años del santo en el pueblo. Hoy, las actividades comenzarán por la tarde, y terminarán pasada la medianoche. Además de la tradicional fogata, habrá juegos para los más chicos, suelta de globos, chocolate, empanadas y hasta chivo. Esta celebración se realizará en el predio que está sobre la ruta 510 y avenida Zuleta.
San Pedro fue uno de los apóstoles de Jesús y el primer Papa. Junto con San Pablo, fue ejecutado alrededor del año 67 por orden de Nerón. Mientras que Pedro fue crucificado, cabeza abajo, según su deseo, porque no se consideraba digno de morir como su maestro Jesucristo, Pablo fue decapitado. Es por eso que hoy se celebra el día de San Pedro y San Pablo.

