Unas 200 personas bailaron y gritaron ayer cuando una planta de energía solar ayudó a transmitir en un pequeño poblado de Oboadaka, en medio del bosque Ghana, la victoria de su selección sobre Serbia. No sólo los probladores disfrutaron por el éxito de su equipo, sino que para muchos fue la primera vez que vio en vivo por televisión un partido del Mundial.

“Tenemos muchas razones para celebrar. Es un doble triunfo para nosotros en el pueblo y debemos disfrutarlo mientras dure”, dijo David Danso, uno de los residentes reunidos alrededor de un proyector impulsado por energía solar.

Danso comentó que él y sus familiares jamás “soñaron” con ver un partido del Mundial en vivo en Oboadaka, un poblado a unos 90 minutos de la capital Accra y que no cuenta con energía eléctrica.

La proyección del juego fue gracias a un grupo alemán de desarrollo social que instaló un equipo de energía solar en la clínica del pueblo.

Rebecca Kwafo, una peluquera de 24 años, dijo que caminó más de dos kilómetros para observar el juego y que es bendición disfrutar de la Copa del Mundo.