El frío -a las 11 la temperatura era de apenas 6,2° y el Sol resultaba el úncio aliado- fue el anfitrión menos amigable para los cientos de sanjuaninos que se acercaron al departamento Pocito para ser parte del tradicional desfile del Día de la Bandera que, esta vez, incluyó la promesa de la bandera, un acto que entregó el pico de emoción de la mañana.

 

Todo se dio sobre la calle Antonino Aberastain y mostró un buen marco de público, que bien abrigado se acercó. Algunos casi que obligados, como los familiares de los alumnos que realzaban la promesa, y otros atraídos por el fervor patriotico.

 

 

El desfile y los actos de rigor estuvieron encabezados por el gobernador Sergio Uñac, acompañado de varios de sus ministros, y el intendente Fabián Aballay, jefe comunal del distrito anfitrión.

 

No faltaron las medialunas, el chocolate caliente y las sopaipillas. Todo valía para soportar el intenso frío.