Franco Fernández es sanjuanino y tiene 7 años. Hace 2 años y 4 meses debió mudarse junto a su familia a Buenos Aires, para ser sometido a diversos tratamientos para tratar una extraña enfermedad: histiocitosis de células de Largenhans. Ahora, la familia planea viajar a San Juan, para ver si el regreso ayuda al niño a controlar sus emociones y mejorar su estado. Mientras tanto, su papá pide colaboración, es que él y su esposa debieron vender todo lo que tenían para costear los gastos que les genera mejorar la salud y la calidad de vida de su hijo.

La historia de Franco fue contada por DIARIO DE CUYO y ahora, Daniel Fernández, el papá del niños habló con TN para contar que regresarán a San Juan.

Daniel, de 32 años, tiene otros 2 hijos, Josefina de 2 años y Joaquín de 5, quienes también tuvieron algunos problemas de salud, pero se encuentran mejor. El hombre, que trabaja en una empresa de lácteos en la provincia, consiguió un permiso especial para viajar y mudarse a un departamento que alquilan frente al Hospital Italiano, donde Franco recibe tratamiento.

Todo comenzó cuando el niño tenía 4 años y le salió una manchita en la espalda. Trataron de curársela con cremas con corticoides, pero no resultaba. "Un día, íbamos caminando y nos pidió agua. La tomó y a los cinco minutos volvió a pedir. Le compramos un litro y se lo bebió como si nada. Quería más y más. Le dijimos que le iba a hacer mal y se desesperó, empezó a insultar y gritar, cosa que nunca había hecho. Se apoyaba en las vidrieras y pedía algo fresco", contó Daniel a TN.

Y agregó, "la pediatra nos dijo que podía ser diabetes insípida. Nos pidió estudios y nos derivó a una endocrinóloga y a una nefróloga. Los análisis indicaban que tenía muchos glóbulos blancos, pero ninguna infección que los justificara".

Franco tenía visión borrosa y la mancha en su espalda se había agrandado. Sentía un profundo cansancio, no dormía y ya no caminaba. Por eso, decidieron llevarlo a Mendoza, donde quedó internado de urgencia. Estuvo tres semanas en el hospital.

Le diagnosticaron diabetes insípida y una lesión en la neurohipófisis que hacía que no regulara la ingestión de líquidos. La hormona que usaron para tratarlo, primero vía oral y después inyectable, hizo que empezara a mejorar, pero las manchas se diseminaron por todo su cuerpo. Pensaron que era una reacción alérgica. Le hicieron una punción y lo enviaron a su casa en San Juan por una semana, pero las crisis siguieron.

La siguiente estación fue el Hospital Italiano. Después de pruebas con medicamentos y estudios y mientras la salud del niño desmejoraba, los médicos le diagnosticaron histiocitosis de células de Largenhans. Los síntomas coincidían, entre ellos la diabetes insípida, pero tenía otros, por ejemplo las manchas en el cuerpo, muy específicas, que no encajaban. Le indicaron quimioterapia, pero el equipo de especialistas está atento a sus reacciones. Necesita control permanente y ajuste de los tratamientos.

"Quiso agredirse con una tijera y un cuchillo. Ha tenido brotes muy fuertes, y los tratan con psicofármacos. Todo es consecuencia de la misma enfermedad, tiene afectado el sistema nervioso central. Estuvo 15 días prácticamente sin dormir”, relató el papá.

Ahora, esperan que la obra social les suministre gamaglobulina para proteger su cerebro, con el fin de mejorar su estado. Si todo sale bien, entre mañana y pasado contarán con esa droga y podrán regresar a la provincia.

“Tenemos que ver cómo reacciona. La idea es que regresar le permita mejorar sus emociones y de ese modo su cuerpo comience a producir hormonas para mejorar el estado de sus neurotransmisores de modo natural”, comentó Daniel a DIARIO DE CUYO.

El plan de la familia y los médicos, es que el niño permanezca en San Juan unos 10 días y vuelva a Buenos Aires para continuar con el tratamiento, para luego viajar a la provincia de nuevo y así sucesivamente, con el fin de analizar su respuesta.

Aquí, el nene será seguido de cerca por una oncóloga del Hospital Rawson que lo tratará en caso de urgencia y se quedarán en la casa de los suegros de Daniel, debido a que ellos antes alquilaban, pero debieron dejar esa casa y vender todo lo que tenían para solventar los gastos en Buenos Aires.

“Necesitamos de todo, sobre todo ayuda económica, pero a mí se me hace muy difícil pedir algo así en general. Por eso, si alguien quiere colaborar puede comunicarse y vemos con qué y por qué medios. El camino es largo porque si logramos quedarnos en San Juan vamos a necesitar cubrir ciertas necesidades de Fran, como por ejemplo tener un baño especial, pero vamos paso a paso”, reveló el hombre, cuyo número de teléfono es 264-4363053.